-No me pidas que mire las estrellas.
Me tragué el universo con nuestro primer beso,
y ahora solo me quedan los hilos que las unían.
Aún así, te prometo hacer con ellos, historias de vaqueros
si me dejas hacer contigo, un poco el indio.
'Tu espalda fué la caricia más reconfortable que pude haber encontrado en tiempos como éste.'