De nada sirve ir a más velocidad si los recuerdos te encadenan.

26 de mayo de 2011

Me encierras en la persona que había jurado dejar atrás.
Contigo es imposible ser otra que no sea yo, y me asusta.
Me asusta mirarte y encontrarme en tus ojos, porque me tengo un miedo horroroso.
Y no se cómo, a veces haces que me olvide de él, y que no me dé pánico mirarme por dentro.
Supongo que me haces mejor persona, me obligas a avanzar.








Te quiero
Supongo que la vida está hecha de todos esos momentos que vamos recogiendo con las manos, con los ojos, con el corazón. Momentos que pueden durar una hora, un día o una semana. Esos pequeños ratos, dónde alguien o algo, te hace sonreír, porque son sólo esos los que se quedan aquí dentro.
Es precioso sentir, que tienes un recuerdo que te inspira, que te gusta y que no duele, al menos en un primer contacto. Recordar yo que sé, la playa, las alturas, la rapidez, las carcajadas, el gas y el pecado, la luz clara y el roce de tus mejillas, de tus manos. Saber que uno de tus recuerdos más valiosos, uno de los que te han formado como persona, como humano, está encerrado en el color de unos ojos, de sólo esos ojos, es acojonante. Porque no he visto jamás un color tan auténtico, transparente e inocente. Mi recuerdo está ahí, en esa sensación.
Cada vez que no tengo nada que hacer, reflexiono, llámame idiota, masoquista o niña, pero lo hago. Y cada vez que busco un motivo, una razón para no rendirme, para valorarme y reconocerme, apareces. Aparece el motivo que me hizo volver a creer, con una sola sonrisa, una solaM me ayuda a no perderme, a esquivarme cuando me escapo de lo que hay aquí dentro.
Y me repito una vez más.
La vida está llena de momentos, de nada más. Ya te digo, pueden duran siglos o milésimas de segundo, pero estás echo de ellos; de un encuentro, de la casualidad, de un plan, de una cita, de mil citas, de carreras, de estirones, de amaneceres y anocheceres, de besos, miradas y abrazos. Joder, estamos echos de buenas intenciones y desastrosos finales. No me jodas, es increíble.
No intentes buscar nada definitivo, en cualquier lado, momento o circunstancia, creces un poquito más.

1 de mayo de 2011

¿Qué buscas?

Deja de mirarte en el espejo con la sensación de estar solo, deja de buscarte en otros ojos durante todo el día, deja de manipular tus manos en busca de otras más sumisas; no hay medias naranjas disponibles en todas las farolas, y no todo el mundo es tan afortunado cómo piensas. Todos tenemos un infierno moral, algunos secretos dolorosos, motivos para no sonreír en abril. Meneamos el trasero en busca de alguna mirada pretenciosa, es natural, pero no hagas de eso tu leyenda personal. Existen colores, imágenes, sensaciones, recuerdos, alegrías y interiores en cada calada que le das al cigarro, en cada esquina que doblas, en cada trago que bebes, en cada beso que das en busca de otro. Entiende de una vez, que lo que llevamos toda la vida esperando, pasa mientras nos dejamos los ojos en las agujas del reloj. Levanta la mirada, mírate, estás ahí, enfrente tuya en el espejo, eres tú, búscate en tus ojos, tócate las manos, tócate. Eres precioso, y ahí fuera, puede que encuentres algo de valor, pero sólo, si ves con los ojos, con los que veo yo.
En su huída se encontrarán con una chica que está segura de amar, pero no de comprometerse a amar para siempre; con una mujer perturbadora que vive sola con una ciega que nunca quiso trabajar y acabó cultivando las rosas más bellas.

Inspírate

trucos blogger