De nada sirve ir a más velocidad si los recuerdos te encadenan.

13 de noviembre de 2012


Os explicaré como va esto del sexo y los sexos, macho-hembra, ese rollo. Bien,
¿En qué piensan las mujeres?
Desde que nos levantamos hasta que nos ponemos ese pijama de franela, estamos sometidas a un reto. El que cada mujer se propone una vez sale por la puerta: dar lo mejor de sí para no caer en la mediocridad, para que no puedan decir 'ella no fue capaz'. Es difícil luchar contra las leyendas urbanas, pero más difícil es evidenciarlas. Ya me entendereis. Cada día nos ponemos una careta, dura y antibalas, y acabamos creyéndonosla. Trabajamos, pasamos de vuestros meneos dicharacheros y de la poesía barata, disimulamos tan bien que nadie se da cuenta. Somos capaces de transgiversar cada monosílabo, mírada o conversación para que parezca que apenas nos importa. ¿Y todo para qué? Sí, para que os deis cuenta de que podemos vivir sin vosotros, podemos vivir sin el primer beso y sin primeras citas. Pero llega ese momento, en el que la carne y la piel de gallina, vencen a ese maldito reto, y acabamos rotitas. Ah, pero tranquilos, no solo nos pasa a nosotras. La diferencia entre vosotros y nosotras es que somos capaces de admitir que nos podeis vencer con un par de velas, o con una conversación interesante, sin embargo, vosotros, impasibles, no sois capaces de admitir el simple hecho de que como Personas, cabe la posibilidad de que ocurra.
Con ese reto diario, fuimos capaces de comprender, de entender, que en realidad os llevamos una ventaja alucinante; eso sí, cabrones hay en todas partes, y lobas, también. Buenas tardes.
En su huída se encontrarán con una chica que está segura de amar, pero no de comprometerse a amar para siempre; con una mujer perturbadora que vive sola con una ciega que nunca quiso trabajar y acabó cultivando las rosas más bellas.

Inspírate

trucos blogger