
Con los pies fríos, ahogada entre sábanas y sin delfines.
Es tan extraña esta sensación que me enamoré de ella,
que te tengo lejos, por fin.
¡Que ya no te veo!
Aparece donde quieras, no te tengo.
No lloré, ni siquiera me inmuté.
Tenía una sonrisa delante mía,
la sonrisa más dulce el universo, esa, ahora puede ser mía.
Y no, ni tus apretones, ni tus besos contra la pared me ganan ahora.
Eso no es el olvido, es amor maltrecho, malgastado..
Amor en histeria.
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