Y es que, es tan simple atracción, cual imanes. Tras la esquina y giras a la derecha, sabiendo que a la izquierda está la otra cara, necesitas evitarla, ya que sabes de sobra que si la miras, si respiras un poco de su física, acabarás mezclando tus olores con su sabor, y la fusión dá la vida, pero la vida, no son más que golpes. Gran poeta el que citó a Becker como iluso, que las golondrinas se van, pero que coño! siempre vuelven al punto de partida.
¡ A U C h !
Esto quiere decir que si giras a la derecha, mas tarde volverás a girar hacia la derecha, y más alante... acabando en una maravilla circular, encontrandote conmigo en la cara
izquierda.
Solo me queda esperarte un rato más para que de un momento a otro te tropieces conmigo, hacer de la vida moratones, sentimientos, locuras, zumo de frambuesa.
en compañía de maría y tu¿
ResponderEliminarSAra, alucinate
ResponderEliminarClaro! jajaja sofi va en mi clase y carlo es un amor! bueno pues ya te veré por ahí! jaja gracias por firmarr :)
ResponderEliminar;)
ResponderEliminarMe ha gustado ver esa referencia a Londres, una de las ciudades que más me gustan, tienes estilo al escribir. No dejes de hacerlo.
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